German Larissa y sus gemelos de nueve años llegan a la casa paterna de su padre en las montañas españolas de Sierra Morena. El vuelo del padre se retrasó, pero los invitados son recibidos como algo natural por su madre y su hermana, que viven juntas. La existencia rutinaria de la mujer, tranquila en su lejanía, es interrumpida por la presencia enérgica de los niños. A medida que pasan los días de calor abrasador, todos intentan relacionarse entre sí. ¿Es una barrera del idioma que hace que una conversación significativa sea casi imposible?